Los consumidores son más exigentes e investigan más antes de adquirir un producto o servicio, así que cualquier estrategia que les dé confianza y los ayude a decidirse por tu marca será una opción efectiva. En este contexto ha surgido el live shopping.
A raíz de la pandemia, las transmisiones en vivo o en streaming ganaron protagonismo al ser una alternativa que permite interactuar con una audiencia en tiempo real, aunque haya distancia. Y esta fuerza continuará en aumento, ya que para el año 2024 se espera que más de 91 millones de usuarios hagan y vean transmisiones en vivo; además, existe un 64 % más de probabilidades de que una persona compre después de haber visto un video en línea.